
La incorporación de la inteligencia artificial en el marketing de las pymes está revolucionando sus operaciones, optimizando significativamente el uso del tiempo y los recursos. Datos recientes indican que los especialistas en marketing de estas empresas recuperan aproximadamente 13 horas semanales por profesional (equivalentes a casi una jornada laboral adicional) y reducen costes en unos 4.739 USD mensuales gracias a la IA. Pese a estos beneficios, solo una cuarta parte de los equipos (25%) ha integrado esta tecnología en todo su ciclo de marketing.
La investigación, titulada “13 Hours Back Each Week”, encuestó a 1 000 especialistas entre el 21 de mayo y el 12 de junio de 2025. Revela que, aunque el 82 % ha probado la IA en alguna tarea, solo el 23 % la utiliza de manera continua desde la concepción hasta la medición de campañas. Los beneficios también incluyen un aumento del 77 % en confianza laboral y una sensación competitiva similar a la de grandes marcas en el 75 % de los casos.


La investigación clasifica el marketing con IA en tres etapas: Imaginar, Activar y Validar. Durante la fase de imaginación, la IA potencia la ideación y personalización; en la activación, crea y difunde contenido; mientras que en la validación, evalúa resultados para refinar estrategias. Pese a este potencial, numerosos profesionales solo emplean la tecnología para la generación de ideas, y son contados los que la utilizan para monitorear el rendimiento en tiempo real, desperdiciando así datos valiosos.
Se identifican cinco niveles de adopción: desde principiantes hasta expertos. Estos ‘expertos’, que representan cerca del 15 % de los encuestados, usan la IA en las tres fases, tienen el doble de confianza en sus resultados y son 14 veces más propensos a adoptar la IA de forma integral. Además, quienes emplean IA a diario ahorran un promedio de 15 horas semanales y más de 5 000 USD al mes, comparado con nueve horas y 3 900 USD mensuales de los usuarios ocasionales.
El estudio también resalta que casi la mitad de las pymes usa IA diariamente, y el 81 % la emplea específicamente en marketing: generación de leads, seguimiento y medición de resultados. Además, estas pequeñas empresas perciben casi el mismo valor de la IA que las grandes, con solo una diferencia de 3 puntos porcentuales. El tiempo recuperado se invierte en planificación estratégica, creatividad y exploración de nuevas oportunidades.
Un hallazgo innovador es la importancia de la transparencia: el 64 % de las empresas que comunican abiertamente su uso de IA reciben respuestas muy positivas por parte del cliente, frente a reacciones neutrales si lo ocultan.
El artículo menciona además ejemplos de herramientas emergentes, como “Breeze” de HubSpot y el “Asistente de Crecimiento de IA” de Mailchimp, evidenciando la creciente competencia en soluciones de IA para pymes.
En resumen:
- La IA ahorra tiempo y reduce costes significativamente.
- Su aplicación completa (de inicio a fin) aún es limitada.
- La transparencia mejora la percepción del cliente.
- La adopción puede acelerarse comenzando con pequeños usos e incrementando la frecuencia.
La recomendación final es mapear las tareas de marketing en las tres fases clave e incorporar la IA primero donde genere mayor impacto. De esa manera, sin grandes inversiones, las pymes pueden pasar de la experimentación a una integración completa y competitiva.